La comunidad del Barrio Parque Industrial, vivió un momento de profunda emoción y espiritualidad junto a su párroco el padre José Nieto y a Monseñor Jorge Lozano, quien presidió los ritos solemnes de dedicación del Templo como Santuario y la consagración del altar de la Capilla de San Cayetano.

Llegaron en procesión, y tras ingresar luego de bendecir las puertas, se vivió un acontecimiento que representa un hito significativo en la vida de toda la comunidad, marcando el cumplimiento de un sueño que ha sido anhelado por muchos fieles durante años. La dedicación de este templo como Santuario no solo resalta el valor de la fe en la vida de la comunidad, sino que también invita a todos los fieles a vivir una espiritualidad renovada y un compromiso más profundo con la misión de la Iglesia.

Monseñor Lozano, en su homilía, reflexionó «la belleza del templo debe ser una expresión de la belleza interior de cada uno de nosotros» resaltando la importancia de contar con un espacio sagrado donde la comunidad pueda reunirse para orar, celebrar sacramentos y crecer en la fe.

Durante la ceremonia, los asistentes fueron testigos de la solemnidad del rito, que incluyó la aspersión de agua bendita, de incensar y  ungir el altar y la colocación de las reliquias de Santa Mama Antula y Beato Ceferino Namuncurá.  La comunidad devota acompañó cada momento de la celebración, llenando el templo de cánticos que elevaban la alabanza a Dios.

La participación comunitaria fue clave, los grupos colaboraron en la organización y decoración del templo, manifestando el sentido de unión y pertenencia que caracteriza a la comunidad de Chimbas.

La dedicación del Templo y la consagración del Altar de San Cayetano no solo marcan un nuevo capítulo en la vida de la Parroquia Santo Domingo de Guzmán, sino también un llamado a todos los sanjuaninos a acercarse y vivir la fe en comunidad, buscando siempre la intercesión de San Cayetano en sus vidas diarias.

Con gran alegría la comunidad recibió la Bendición del Papa Francisco, que monseñor Lozano custodió desde Roma.

 ¡Bendito San Cayetano, intercede por nuestro pueblo de San Juan!

Significado y rito de la dedicación de una iglesia
Todos los ritos de la solemne dedicación de una iglesia tienen por finalidad preparar el altar para disponerlo a ser lugar de sacrificio y mesa del Señor, el lugar donde se celebra la Eucaristía que es el sacramento del sacrificio de Cristo y el alimento del pueblo de Dios.

Todo recinto sagrado católico existe para reunir a los fieles en los actos de culto y la adoración comunitaria de la Santísima Trinidad. Por tratarse de lugares en los que Dios tiene su morada y los sacerdotes renuevan el sacrificio de Cristo en la cruz, la Iglesia dispuso una liturgia solemne de dedicación para agradecer al Señor, «porque en esta casa que nos has permitido edificar y en la que no cesas de favorecer a esta familia tuya que peregrina hacia ti, simbolizas el misterio de tu comunión con nosotros y admirablemente lo realizas».

Por otro lado, y en sintonía con una antigua costumbre ligada íntimamente con la devoción popular, los recintos dedicados al culto suelen estar encomendados específicamente a una advocación de la Santísima Virgen, a un símbolo de la fe o a un santo, que interceden ante Dios para que la labor apostólica del recinto dé frutos abundantes.