El sábado 27 de julio, como Arquidiócesis de San Juan de Cuyo vivimos un momento histórico y espiritual único con la realización del Primer Encuentro para Animadores de Asambleas en el marco del 3° Sínodo de San Juan.
Este evento, celebrado bajo la poderosa protección de San Juan Bautista, marcó un hito significativo, ya que comenzamos a dar los primeros pasos que nos llevaran a un proceso de escucha casi al cumplir 100 años desde la última vez que la diócesis convocó a un sínodo.
Un encuentro repleto de compromiso, con la presencia de más de 220 animadores provenientes de diversas comunidades dentro de nuestra arquidiócesis. Esta notable participación demostró la vitalidad y el fervor de nuestra comunidad católica, decidida a renovarse y a trabajar unida para el bien común de la Iglesia local.
Durante el encuentro, nuestro arzobispo, Monseñor Jorge Lozano junto con la Comisión de Animación del Sínodo, dieron inicio a las actividades del evento. Monseñor Lozano expresó con gran claridad la importancia de este sínodo como un espacio de reflexión, diálogo y crecimiento espiritual. «Estamos aquí para escuchar al Espíritu Santo y para discernir juntos el camino que nuestra arquidiócesis debe seguir», destacó.
La Comisión de Animación del Sínodo presentó “el camino sinodal”, haciendo hincapié en este primer tiempo; de escucha y discernimiento junto a la importancia de la metodología de la conversación espiritual guiando cada paso para la realización de las asambleas.
Todo lo preparado para este encuentro fue diseñado para inspirar y capacitar a los animadores en su labor pastoral.
Agradecemos la presencia comprometida de los animadores de distintas comunidades, especialmente de los que haciendo un gran esfuerzo llegaros desde las parroquias más alejadas de la provincia, que renovaron su compromiso de servicio y fe, pidiendo la intercesión de San Juan Bautista para que guíe y proteja este camino sinodal.
La Arquidiócesis de San Juan de Cuyo avanza con esperanza y unidad en este camino sinodal, confiando en que el Espíritu Santo nos llevará a un renovado tiempo de gracia y bendición. A todos los animadores y fieles, agradecemos su dedicación y les animamos a seguir participando activamente en este proceso transformador. Que San Juan Bautista interceda por nosotros y nos conduzca siempre hacia la verdad y el amor de Cristo.